Las ventanas sin barreras deben cumplir con determinados requisitos. Deben permitir que un usuario de silla de ruedas las pueda usar como si de una persona sin limitaciones se tratase. Para ello, hay que evitar obstáculos como los herrajes de difícil manejo. La norma DIN 18040-2 lo establece así:
- Una ventanas sin barreras se encuentra a una altura adecuada para permitir la vista al exterior también en posición sentada.
- Por habitación debe haber instalada una ventana que pueda abrirse fácilmente para permitir la ventilación. La fuerza necesaria para abrirla debe ser inferior a 30 Newton
- El tirador se deberá situar a una altura de 85 a 105 centímetros o la ventana deberá integrar otros sistemas de apertura, como un interruptor eléctrico.
Según estas indicaciones, ofertamos ventanas instaladas a una altura cercana al suelo o modelos a una altura relativa de 60 cm. En las ventanas cercanas al suelo, se debe instalar también un sistema anticaídas según la normativa. Para las personas con discapacidad visual, se debe atender a que los elementos de manejo sean fáciles de reconocer. Esto es fácil de conseguir con una iluminación adecuada o una selección de colores con contrastes.